¡Francamente! no entiendo la ley del menor. Hoy en la "te le",todas las cadenas daban la misma noticia. Una madre condenada por dar un (sopapo) a un chiquillo rebelde y por que no, mal criado, pero ¡claro ! ¿quien se atreve a levantar la mano a un hijo? ¡enseguida te amenazan con denunciarte! y ¡que pena! resultado, la cárcel. Y digo yo,¿los niños de ahora solo tienen derechos? que pasa con los derechos de los padres?.
No penséis que defiendo el maltrato infantil, ¡de ninguna de las maneras! soy la primera en defenderlos ¡faltaría mas!, pero pienso que hay situaciones en que te ves "impotente" pues tu quieres lo mejor para tus hijos,y quieres educarlos ,pero ¿como lo haces si te quitan toda la autoridad?, no hace falta (como dice el refrán) matarlos a palos,pero creo que un "sopapo" a tiempo evitan males mayores.
¡Claro que yo soy mayor! y en mis tiempos se les llamaba de (de usted) a los mayores,como señal de respeto,¡ni tanto ni tan calvo! en el termino medio esta la virtud.
En mi humilde opinión, los niños de hoy,se creen con derecho a insultar...a despreciar,, en resumen a todo lo que ellos quieran ¡como son menores y la ley los ampara!campean a sus anchas, yo he criado a tres hijas,y debo confesar que alguna vez (pocas) he tenido que darles un cachete, y ninguna se ha traumatizado por eso, al contrario,¡me dan las gracias por haberlas educado en el respeto a los demás,y sobre todo a ellas mismas.
1 comentario:
Amiga Esperanza, cuánta razón llevas. Hoy en día, los niños están insoportables, no puedes decirles nada; te amenazan con denunciarte o con irse de casa. ¡¡¡Es una pena!!!.
Pero la culpa, a mi modo de ver, la tiene las interpretaciones que de la justicia aplican a veces los jueces, que no sé qué coño piensan, ni qué pretenden con llevar a una madre a la cárcel y con orden de alejamiento del hijo. En esos casos, salen todos perjudicados.
No conozco en profundidad la situación que se ha juzgado, y por tanto es mi opinión es un tanto aleatoria, pero en principio, te diré que un cachete a tiempo a un hijo, te duele a ti tanto como a él, pero al rato se nos ha pasado el enfado a uno y a otro. Con esas medidas actuales, se fomenta, pienso yo, la destrucción progresiva de las familias. Por supuesto que yo no soy partidaria del maltrato a los niños, pero se están alcanzando unas cotas, en las que con tanta “defensa del menor”, se está incubando la fiebre de la desintegración familiar y del respeto a los padres.
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